Qué es Deja Huella

En un mundo marcado por la guerra y la desesperanza, surgen historias de inspiración que nos recuerdan que la fe y el amor pueden prevalecer incluso en los momentos más oscuros. Una de esas historias es la de "Deja Huella", un movimiento misionero que busca llevar un mensaje de esperanza y fe a través de la moda.

El origen de "Deja Huella" se remonta a los campos colombianos, donde la guerra y la violencia habían dejado profundas cicatrices en la tierra y en los corazones de las personas. Fue en este contexto desafiante donde un grupo de jóvenes decidió crear un grupo misionero, buscando llevar la luz de Dios a aquellos que solo conocían la oscuridad de la guerra.

A través de sus experiencias en misiones y proyectos compartidos, estos jóvenes se dieron cuenta de la necesidad desesperada de esperanza y fe en las comunidades campesinas. Fue entonces cuando nació la idea de "Deja Huella", un movimiento que busca dejar una marca positiva en el mundo, inspirando a otros a vivir una fe que contagie.

Si bien "Deja Huella" no fue fundado por los socios de "880", fue en este movimiento donde se encontraron y se unieron bajo una visión compartida. Inspirados por la misión de "Deja Huella" y su deseo de marcar una diferencia en el mundo, decidieron utilizar la moda como una herramienta para transmitir un mensaje de esperanza y fe.

Así nació "880", una empresa de moda católica para jóvenes que busca contagiar la fe a través de sus diseños únicos y significativos. Cada prenda de "880" es más que una simple pieza de vestir; es una declaración de identidad y una invitación a vivir una fe auténtica y vibrante.

A través de sus productos y su compromiso con la misión de "Deja Huella", los socios de "880" están dejando una huella de amor, esperanza y fe por dondequiera que van. Su visión es clara: generar fe que contagie, inspirando a otros a vivir una vida conforme a lo que creen y creando una curiosidad en aquellos que encuentran sus prendas.